Los datos de los expertos afirman que casi un 30% de las mujeres siente vergüenza al hablar de temas sexuales con su médico de ginecología, por lo que evita este tipo de temas, incluso cuando sufre problemas como falta de libido, sequedad vaginal o cualquier disfunción sexual. De esta manera, no consigue la ayuda que necesita para solucionar sus problemas, por lo que hay que terminar con esta vergüenza hablar de sexo con el médico.
¿Es cierto que las mujeres no hablan de sexo con su médico?
Las revisiones ginecológicas no sirven solo para comprobar que todo está bien en el sistema reproductor, son también una oportunidad de resolver todas las dudas que podamos tener sobre fertilidad, menopausia o sexualidad.
Sin embargo, en la mayoría de las ocasiones las preguntas se reducen a cuándo hemos tenido la última regla, qué método anticonceptivo usamos y poco más. Son muchos los ginecólogos que no preguntan a sus pacientes temas concretos sobre sexo, y muchas las mujeres que no preguntan.
Así, según un estudio realizado en Estados Unidos, solo el 40% de los médicos de ginecología evalúa la sexualidad y pregunta por la existencia de problemas sexuales. Todavía es menor el porcentaje de profesionales que preguntan sobre satisfacción sexual (28,5%), orientación o identidad sexual (27,7%) o el placer experimentado por esta práctica (13,8%).
Además, otro estudio suizo afirma que solo el 7,9% de los ginecólogos pregunta de forma habitual por alteraciones de la vida sexual a sus pacientes.
Es cierto que estas preguntas son más habituales en determinadas etapas de la vida, como la menopausia (88%) o el posparto (70%), o por parte profesionales con formación específica en sexología clínica, pero debería ser algo habitual en todas las consultas, en cualquier etapa de la vida y a cualquier edad.
Otro estudio realizado en España afirma que menos del 27 por ciento de los ginecólogos pregunta sobre sexualidad a quienes realizan una consulta. Otro trabajo señala que en los primeros 10 minutos de consulta casi ninguna paciente le habla a su médico o médica de sexualidad y que, después de ese tiempo, si el profesional le pregunta, el 98 por ciento tenía dudas.
Un 43 por ciento de mujeres españolas admite que, en alguna ocasión, la vergüenza les ha frenado a la hora de preguntar a su ginecólogo sobre sus dudas en salud íntima y sexual y de ese porcentaje, una de cada tres reconoce que esa timidez a la hora de consultar al especialista agravó ese problema o enfermedad sobre el que tenían dudas.
Muchas mujeres no le dan la importancia suficiente y van dejándolo pasar hasta que la situación es severa. Algo que no debemos permitir.
¿Por qué no se habla de sexo en el ginecólogo?
Existen diversos motivos que hacen que ni los profesionales de ginecología pregunten sobre sexo a sus pacientes ni estas hagan lo propio. Y este hecho se debe a motivos por ambas partes.
Por parte de los ginecólogos las causas principales son:
- Falta de formación sobre sexo.
- Miedo a avergonzar a la paciente.
- Incomodidad del profesional respecto a los temas sexuales.
- Modelo de atención basado en la patología y no en la prevención.
- Falta de tiempo. Las consultas médicas suelen ser breves y es posible que las mujeres sientan que no tienen tiempo suficiente para abordar sus preocupaciones sexuales en ese contexto.
- Consultas diseñadas sin tener en cuenta la intimidad de las pacientes.
- Vergüenza o tabú. Algunas mujeres pueden sentir que hablar sobre su vida sexual es inapropiado o que serán juzgadas.
Mientras que las principales barreras con las que se topan los pacientes a la hora de entablar una conversación sobre sexo son:
- Miedo a que el médico piense que es un tema que no debe tratar con él.
- Pensar que no existe tratamiento disponible para su problema sexual o que es un tema sin importancia por el que no debe molestar al médico.
- Vergüenza.
- Falsas creencias o mitos respecto a la sexualidad.
- Muchas mujeres pueden no estar suficientemente informadas sobre su propia salud sexual y pueden no saber qué preguntas hacer o qué aspectos abordar durante la consulta ginecológica.
Consecuencias de no hablar de sexo en la consulta ginecológica
Y no preguntar sobre sexo a nuestro médico puede tener serias consecuencias en nuestra salud física, emocional, sexual…
- Falta de información: se puede perder la oportunidad de obtener información y educación sobre salud sexual. Esto puede llevar a malentendidos, ideas erróneas o falta de conocimiento sobre prácticas saludables, prevención de enfermedades de transmisión sexual, anticoncepción y otros aspectos importantes de la sexualidad.
- Dificultades en el diagnóstico: si no se explican los síntomas o problemas que notamos en relación al tema sexual, será difícil recibir el diagnóstico adecuado y saber cuál es la causa la solución adecuada a nuestro problema. Esto puede retrasar el tratamiento y prolongar los síntomas o el malestar.
- No abordar preocupaciones emocionales: la salud sexual está estrechamente relacionada con el bienestar emocional. Al no hablar sobre temas sexuales, las mujeres pueden dejar sin resolver preocupaciones, inseguridades o dificultades emocionales relacionadas con la sexualidad. Esto puede afectar negativamente su satisfacción personal y su calidad de vida en general.
- Falta de orientación y apoyo: la consulta ginecológica es un espacio donde las mujeres pueden obtener orientación y apoyo en relación a su vida sexual. Al no aprovechar esta oportunidad, se puede perder la posibilidad de recibir consejos y recomendaciones valiosas que pueden mejorar su salud y su vida sexual.
- Problemas de salud: el sexo es bueno para nuestra salud y una buena salud sexual significa aumentar el sistema inmune, mejorar la manifestación de oncogenes y desarrollar el retraso del envejecimiento. El sexo reduce el estrés y mejora el sueño, por lo que mantener una vida sexual es fundamental para estar más sanos y vivir más.
En resumen, incluir en las consultas de ginecología todos los asuntos relacionados con el sexo es fundamental, dado que muchas patologías y sus correspondientes tratamientos tienen consecuencias negativas en la vida sexual de las mujeres.
Por ejemplo, la incontinencia urinaria (IU) puede causar inactividad sexual o disminución de la frecuencia sexual habitual. También otras patologías como prolapso genital sintomático, endometriosis, etc.
Cómo hablar de sexo en la consulta ginecológica
Por este motivo, es especialmente importante romper todas las barreras previamente mencionadas y hablar de salud sexual en el ginecólogo. Las preguntas sobre sexualidad deben formar parte de la rutina ginecológica, por lo que es necesario que todos, tanto médicos como pacientes, rompan esas barreras, dejen a un lado la vergüenza y hablen de este tema con naturalidad.
Si la mujer no saca el tema, debe ser el médico el que haga preguntas como sobre sexo: ¿siente dolor al practicar relaciones sexuales? ¿Nota sequedad vaginal o algún otro problema? ¿Siente últimamente la libido más baja? ¿Cómo de satisfecha se siente en la vida sexual? ¿Cree que tiene problemas?
Es importante que los médicos creen un espacio seguro y confidencial donde las mujeres se sientan cómodas para hablar sobre cualquier tema relacionado con su salud sexual.
Y si no es el médico el que pregunta, deberán ser las mujeres las que venzan la timidez o los miedos que sientan y realicen aquellas consultas que desean hacer. No hay que irse del médico con dudas sin resolver.
Recuerda que los ginecólogos están capacitados para abordar temas sexuales y son una excelente fuente de información y apoyo. Pero si te sientes incómoda o no satisfecha con las respuestas recibidas, puedes buscar un profesional de la salud especializado en salud sexual o un terapeuta sexual que te ayude a resolver tus problemas y seguir disfrutando del sexo.
